miércoles, 20 de enero de 2010

La muerte lenta del Imperio


Mr. Obama



No es de extrañarse que su popularidad haya decaído frenéticamente. Su llegada al poder marcaba una senda y un camino que reavivaba las esperanzas no solo del pueblo norteamericano sino del mundo, pues casi todas las miradas del planeta apuntan hacia esta nación ya sea debido a las críticas o las felicitaciones por el supuesto “éxito” de la teoría del capital. He aquí unas cuantas razones que han hecho declinar su popularidad:

1.- Los nacionales y extranjeros soñábamos con un profundo cambio en las estructuras de esta sociedad, es decir, terminar con la crisis hipotecaria, financiera y laboral. (Dicho sea de paso que esto solo cambiará cuando cambie el sistema). Este es el planteamiento que debemos hacernos hoy ¿Vale la pena seguir invirtiendo para mantener un sistema que esta colapsando y destruyendo el ecosistema y al ser humano?, ¿esta cerca el fin de capitalismo? ¿Es posible y viable la mirada hacia el socialismo o el comunismo? Posiblemente en el debate de estos temas aparezca la luz necesaria. Lo cierto es que el presidente no ha podido hacer mucho en este campo.

2.- Los nacionales soñábamos que se empiecen a producir todos los bienes y servicios dentro del país y contrarrestar en este momento la decisión del ex Presidente Bill Clinton de sacar a las empresas de los EEUU con la ingeniosa idea de abaratar los costos de los productos (como idea era brillante), y logró su cometido, hoy en día las cosas están baratas pero la gente no tiene dinero para comprarlas porque simplemente no hay empleos porque ya no están las empresas.

3.- Los nacionales y extranjeros soñábamos con el fin de una Guerra absurda, sin razón, sin motivos ni enemigo definido (porque eso del terrorismo suena muy difuso) y que los soldados de Irak y Afganistán (que en su gran mayoría son de centro y sur América) regresarían inmediatamente a casa.

4.- Los extranjeros soñábamos con el fin del perverso y abusivo embargo a la hermana Republica de Cuba. Si EEUU es la nación más grande del planeta o una de las más grandes debería defender a sus hermanos más pequeños (como Cuba), no acorralarlos ni ponerles imposiciones económicas, políticas y sociales solo porque piensan de manera diferente y porque creen en un modelo de desarrollo diferente.

5.- Los extranjeros, mis hermanos centroamericanos y sudamericanos señor Presidente soñaban con una reforma migratoria seria y hasta había delirios por una amnistía que aún no llega pero que sigue siendo fervientemente esperada. Es obvio darse cuenta a estas alturas que no lo hará nadie, pues al hacerlo se agotaría un discurso político. Este es un exquisito tema para cuando se convoque a nuevas elecciones.

En fin señor presidente, nos dejó con los sueños rotos, nos robó un poquito de esperanza, nos llenó de desilusión, y con un fabuloso sin sabor tenemos que decir, Mr. Obama without your help, is very difficult, very expensive and so far.

Siga así Mr. Obama que los republicanos ya tienen la paila y el aceite bien caliente. ¿Adivine usted a quien piensan freír? Lamentamos informarle que la estrategia del premio Nóbel no funciono, pero en la parte superior tiene algunas estrategias que le podrían aumentar su popularidad y a la vez mejorar el estilo de vida de los nacionales y extranjeros.



Wellington Rubio
New Jersey
Enero 20 de 2010


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